LA VELETA

La veleta, si, un artilugio que se pone en los tejados y se mueve al compás del viento, según venga esta se va a un lado o a otro, según la velocidad, lo mismo, si es una brisa va lentamente, si es un vendaval va igual de rápido.

En nuestro panorama político estamos muy parecidos a este artilugio, nuestro gobierno hace exactamente lo mismo que una veleta, según le sopla el viento este actúa, es muy imprevisible porque nunca se sabe por donde soplará la brisa ese día y hay que esperar a que el viento decida, nunca está quieta ya que rápido o suave se mueve continuamente y jamás de los jamases va contracorriente, siempre siguiendo el ritmo de lo que tiene alrededor.

Todos los Españoles estamos esperando a ver por donde sopla el viento de la crisis pensando que nuestro gobierno tomará cartas en el asunto y se moverá a favor de la brisa que sopla intentando arreglar los problemas mas acuciantes, pero cuando nos parece que se mueve en el sentido correcto aparece el vendaval de sus ideas grandiosas que le urge a moverse en una gran tormenta de ideas pro subencionistas y de corte socialista, pero hete aquí que vuelve a soplar ya no la brisa sino ya un viento de crisis explosiva y de nuevo nuestro gobierno se ve arrastrado por ese viento urgente que le arranca la venda de los ojos y le hace darse la vuelta a los problemas y carencias urgentes del país, pero, vuelve a soplar, ya no un vendaval sino un ciclón que le hace mirar hacia otro lado, ya no ve la crisis, ni los problemas, solo ve sus ideas largamente pensadas y no puestas en hechos y de nuevo le sale la vena de ponerlas en funcionamiento y esto se repite y se repite incansablemente, mientras, el tiempo pasa y la veleta sigue sin tomar una dirección concreta, sigue cambiando de dirección según le sopla el viento hasta el infinito, y mientras, todo cambia y nada se arregla, no se toman decisiones, solo se posponen esperando vientos favorables que nunca llegan.